lunes, septiembre 18, 2006

Entrevista Bunbury & Vegas (IV)

Hay dos colaboraciones vocales estelares. La de Christina, que habeis comentado antes, y la de Gary Louris. ¿Por qué ellos?

(NV) Cuando comenzamos a ensayar queríamos que hubiera una colaboración femenina y, no sé, por circunstancias. Cuando el disco se definió mucho, hablé con Enrique, y con Christina yo tenía una deuda pendiente de hacer algo juntos, le ofrecí hacer algo y Gary Louris estaba por allí, nos gustan algunos discos de los Jayhawks…

(EB) La cosa que tiene Paco o no sé si la tiene El Puerto es que está aglutinando a una serie de gente y creando una especie de comunidad artística. Gary estaba allí y pensamos “joder, tenemos a una luminaria del rock internacional que está en el pueblo” y la verdad es que Paco me lo comentaba y yo dije que lo quería conocer y son gente magnífica. La verdad es que yo siempre pensé que Gary tiene una voz tan bonita que es imposible que no funcione aunque no cante en español, aunque sean unos coros de estos que él hace sin ningún tipo de letra. La verdad es que él tenía muchas ganas y se habría metido a más canciones.

(NV) Lo que tiene Gary es que es un cantante de soul pero más americano, con más raíces en el folk y en el country. Hace unos coros en falsete pero que en realidad tienen esta cosa de folk que no está nada alejada de lo que hacíamos. Tiene ese punto que le da a la canción, que ves que sin ello no sería lo mismo.

La verdad es que el disco es muy norteamericano en cuanto a sonido, ¿no?

(EB) Pues a mí me parece que sí. La verdad es que creo que últimamente estamos muy poco orientados hacia Inglaterra. No sé si Nacho ha tenido sus momentos, supongo que sí, su época Smiths y eso…

(NV) A mí me da mucha rabia a veces estas etiquetas que le ponen a los discos de neofolk y así, no es cierto, no puedes hacer folk sin ser la música popular de un determinado sitio. El folk puede ser una influencia para la música que haces, para el rock o lo que sea, pero si no lo haces con intención de hacer música del sitio de donde eres o donde estás no puede ser folk. Una de las principales influencias del rock es el folk y country americanos pero a mí me gustan esas pinceladas que aportamos al hacerlo desde donde lo hacemos. Por ejemplo, hay canciones como “Por la paz de la canción” con acordes muy sencillos y un toque muy country, pero recuerdo que cuando estuvimos hablando de cómo arreglarla estábamos hablando de hacerla con un banjo, con un steel guitar, pero Xel tenía un buzuki, se hizo con un melotrón, y es una manera más europea de llevar esa canción. Es un saco donde hay un montón de influencias y el sonido americano tiene mucho peso pero creo que en realidad está definido como una influencia para hacer algo diferente. Este disco creo que a un estadounidense le sonaría europeo. Creo que tiene esa cosa europea que pocas veces se destaca, aunque yo lo que más escucho sigue siendo el country, aunque nunca haya hecho eso porque no soy americano.

¿Quién es Luis Demetrio Troconis?

(NV) Es un compositor mexicano. Yo no sabía quién era hasta que entré en Internet para ver quién había compuesto “Bravo”, que la conocimos por Bambino.

¿Por qué la decidisteis versionar? ¿Qué os atraía de esa canción?

(NV) Cuando Enrique empezó la gira de “El viaje a ninguna parte”, que la comenzó en Oviedo y fue cuando me llamó, años después del “Radical sonora”, fui a ese concierto y recuerdo que había hablado con Luis Troquel sobre un homenaje a Bambino. Hablamos de a ver si hacíamos algo juntos y –a Bunbury- no sé si recuerdas que yo te dije, “tenemos que hacer ‘Bravo’ de Bambino” y que me apetecía contigo, porque seria perfecto hacerlo. Yo la toqué alguna vez en directo con mi grupo pero de una forma menos trabajada que como la hacemos ahora. Cuando empezamos a hacer este disco una de las primeras canciones que se propuso fue ésta.

(EB) Creo recordar que en las pruebas del "Freakshow" estabas tocando esa canción. Ya estaba merodeando en el ambiente.

¿Qué creeis que aporta este disco a vuestras respectivas carreras? Enrique, por ejemplo, hablabas en una entrevista hace poco de que sería un álbum de transición…

(EB) Sí, pero porque todos los álbumes son de transición. Seguramente decía eso inmediatamente después: “éste es un disco de transición, como todos”. En realidad, esto tiene algo especial para mí porque, por mis circunstancias, después de “El viaje a ninguna parte” me iba a meter en un disco que se iba a llamar “Judas” y que dejé algo aislao porque en realidad de alguna forma vi que empezaba a repetirme. De otra forma, veo que a través de Nacho y de la banda y de Paco y de este disco digamos que he encontrado un lugar en el que me encuentro ahora mismo muy a gusto y que encaro mi próximo álbum con una cara mucho más positiva que en el otro momento en que estaba un poco agobiado por una serie de circunstancias. Por el hecho de llevar mucho tiempo colaborando con un mismo equipo veía que la repetición estaba a punto de llegar, y a mí la repetición me aterra. Entonces la transición en este álbum yo la veo como un aspecto positivo. Es un disco bisagra, que me abre una puerta. Como el disco éste de Manta Ray que tiene el título que tanto me gusta: “Pequeñas puertas que se abren, pequeñas puertas que se cierran”. Pues se cierra un puerta pequeña y ésta es otra que de repente se ha abierto y es para mí un soplo de aire fresco que me libera enormemente.

(NV) Para mí no es muy diferente en realidad. Es mi próximo disco pero un disco con el que me he encontrado más que uno hecho a conciencia. Igual que otros discos sabes que tienes un repertorio y vas a grabarlo, éste sucedió en diferentes momentos como te contamos antes, pero al final me encontré con que éste era mi nuevo disco pero además en un momento muy extraño para mí en el que ahora estoy haciendo conciertos con Las Esferas, con mi grupo, pero que quizás el próximo sea el último porque ahora quiero tener un tiempo para hacer otras cosas. De repente me he encontrado con mi siguiente disco pero de una forma que tenía sentido, no sé, una cosa un poco determinista que creo que todo tenía que ser así. También lo veo como un disco bisagra, que va a marcar un antes y un después en los siguientes que haga. Pero la verdad es que siempre que me preguntan algo parecido, la verdad es que es difícil ver los discos si no es con perspectiva. Haces los discos y lo ves de una manera, y luego pasa un año y ves lo que significa con respecto a los discos anteriores que hiciste tú. Me encuentro tan ilusionado como si fuera otro disco mío.

(EB) A mí algo que me parece importante de este disco es que en realidad… es que no sé cómo resaltar esa cosa. Lo que hablábamos del síndrome del disco paralelo. Esto no es un proyecto paralelo sino de dirección única. Es como mi proyecto principal y siento que es el proyecto principal de Nacho, ¿no? No es que mientras estamos haciendo otras cosas hacemos otro grupo paralelo una pandilla de amigos ahí que bebemos el mismo licor. No es esa cosa, de alguna forma creo que dentro de mi discografía éste es un disco importante y desde la de Nacho… bueno, de hecho incluso te diría más, personalmente creo que hay canciones de Nacho en este disco que me parecen de las más importantes que ha hecho y que no va a poder dejar de tocarlas en sus conciertos. Y también te diría, sin miedo a ser un fardón, que aquí hay algunas de las canciones más bonitas o no sé si serán las más importantes o conocidas de mi carrera pero para mí sí son importantes. No sé la repercusión que pueden tener, pero tengo aquí algún logro especial.

(NV) Yo lo suscribo.


Canción del día: "Las cosas fingen" (Josele Santiago)

Famosos avistados: Julián Hernández (La Catrina)