Otro diálogo entre Midori y Watanabe
-No te conozco lo suficiente
-¿Quieres decir que, si me conocieras mejor, tú también acabarías presionándome como todos los demás?
-Es posible -dije-. En el mundo real todos vivimos presionándonos los unos a los otros.
-Sí, pero no creo que tú lo hicieras. Yo estas cosas las adivino. En cuanto a presionar y a ser presionada, soy una autoridad. Y tú no eres así. Contigo siento que puedo bajar la guardia. ¿Sabes que en este mundo hay montones de personas a quienes les gusta forzar a los demás a hacer esto y lo otro, y que, a su vez, les gusta que les fuercen? Y montan un gran follón con todo esto. Yo te he presionado porque tú me has presionado... Les encanta. Pero a mí no. Yo lo hago porque no me queda otro remedio.
-¿Y a qué cosas fuerzas a los demás? ¿O a qué cosas te fuerzan los demás a ti?
Midori se llevó un cubito de hielo a la boca, que chupó durante un momento.
-¿Quieres conocerme mejor?
-Me gustaría -reconocí.
(De "Tokio Blues", de Haruki Murakami)
5 Comments:
"perro ladrador, poco mordedor"
"agua que no has de beber, déjala correr"
"nadie es imprescindible"
entre el refranero popular y las leyes de empresa nos merendamos a la Midori esta y a todas las demás, no te parece? y ella (o él) que coma hielos... que coma...
"perro ladrador, poco mordedor"
"agua que no has de beber, déjala correr"
"nadie es imprescindible"
entre el refranero popular y las leyes de empresa nos merendamos a la Midori esta y a todas las demás, no te parece? y ella (o él) que coma hielos... que coma...
es que era mío... no podía consentir que fuese anónimo :)
ya querido darkent... pero mientras ladra el perro te puede tocar mucho las narices... o no? pq mientras no aprendes que el agua no se ha de beber seguro que le metes algun chupito... y mientras tanto nada de eso es imprescindible... pq somos curiosos y las personalidades nos llaman la atencion y queremos conocer... . . ... .. . y tu lo sabes... y hemos caido en ello... y caeremos
habla en singular iritatirita, habla por tí... aunque en realidad tienes razón. Todos nos comportamos así. Lo que ocurre es que hay gente que admite dos pedradas y otra que aguanta una lapidación, pero eso también se aprende. Creo. Yo por ahora voy a seguir con mis refranes.
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