"Sunshine", de Danny Boyle. De viaje por el sol. (Contiene spoilers)

Estéticamente: muy buena. Sin ser una superproducción yanqui de altísimo presupuesto, Danny Boyle consigue altos niveles de credibilidad y espectacularidad en la ambientación de la película, con un interesante concepto de claustrofobia en esa nave espacial que se aproxima al sol y es invadida por torrentes de luz. También interesante el descubrimiento de la nave que fracasó en su misión anterior (tal cual penetración en un buque fantasma: eso nunca falla), con las primeras escenas con destellos casi subliminales de vida de la tripulación anterior. El montaje es vigoroso y la música (Underworld) queda muy bien.

Argumentalmente: muy pobre. Desde el momento en que (ay, cuánta posmodernidad) uno de los personajes dice que no se separen, no vaya a ser que llegue un Alien que los mate uno a uno, Alex Garland está reconociendo hacer un refrito de títulos pasados de la ciencia ficción. Ni los personajes están lo suficientemente perfilados como para tener un mínimo de interés ni ninguna de las situaciones que suceden consiguen enganchar suficientemente: todo suena ya a muy visto. Lo peor de todo: la figura del capitán que quiere sabotear la misión y es imposible de matar y, sobre todo, esa ya cansina y pueril idea de el-héroe-que-se-tiene-que-sacrificar-para-salvar-a-la-humanidad y bla, bla, bla.

Canción del día: "Cosmia" (Joanna Newsom)

Frase del día: "Se contrasta nuestra hipótesis de mierda" (María Piringosa)

Famosos avistados: Guillermo Fesser (pasadizo de la Plaza de los Cubos)