sábado, junio 07, 2008

Entrevista Spiritualized

Este viernes se publicó en el Metrópoli la segunda entrevista que le hice a Jason Pierce (Spiritualized). Al otro lado del hilo, el hombre también conocido como J. Spaceman es realmente majo, con un tono de voz sincero y amable. Puede que, en una nueva entrada, recupere parte de la anterior. Aquí va la transcripción completa (freelancer's cut) de la más reciente.

¿Cómo va vuestra nueva gira? ¿Mantiene algo del concepto del Acoustic Mainlines Tour del año pasado?

Hay considerables diferencias. Los conciertos acústicos fueron una especie de accidente, no esperábamos hacer una gira. Todo empezó con un show para Daniel Johnston, fue un concierto conmovedor en el que incluso nosotros nos emocionamos, arrebatador y hermoso. La gente empezó a proponernos conciertos, tocamos en Roskilde, luego hicimos más festivales… Ahora intentamos retener parte de esa belleza en el show eléctrico. Es importante recalcar que no venimos con un espectáculo eléctrico para decir “¡oh, esto es lo que solíamos hacer!”. Es muy importante lo que hacemos ahora, que cambia con respecto a lo que hacíamos antes.

¿Qué formación lleváis?
Una banda más pequeña, de cinco piezas con cantantes de gospel.

“Songs In A & E, tu nuevo disco, fue truncado por una grave enfermedad que te tuvo hospitalizado hace dos años, un factor que no ocultas. ¿Hasta qué punto ha sido realmente influido por ello?
Es difícil de decir, pero creo que no tanto como se piensa. Hay toda esa historia alrededor. Me puse enfermo mientras estaba haciendo el disco, pero no es un álbum sobre mi enfermedad. Todas las canciones estaban compuestas antes aunque, de algún modo, parecían profetizarla y puedes encajar todo para que parezca que hablan de ello. Lo más difícil para mí fue terminar el disco, porque cuando estás lejos de algo durante tanto tiempo se queda como un trabajo viejo, no tienes la necesidad de seguir con ello porque ya no es importante. Hay algo extraño y bello con respecto a este álbum, parece que tenía la necesidad de ser finalizado.

¿Cambiaron mucho las canciones durante el proceso o quisiste preservar su espíritu inicial?
Son bastante parecidas, lo que sucedió fue que me impliqué con Harmony Korine, el cineasta, y el me pidió que hiciese la banda sonora para su nueva película, “Mr. Lonely”. Era el momento en que yo me sentía en lo más bajo, no tenía ni idea de cómo acabar mi disco, ya lo había mezclado dos veces y me sonaba muy pobre. Fui al estudio a probar a hacer algo para su película y me puse a trabajar solamente con sonido, con música instrumental. Fue tan liberador trabajar así que decidí llevar parte de ello a mi álbum. Ambos proyectos empezaron a coincidir y a enlazarse. Hay trozos de mi álbum también en la banda sonora, y ello le dio a mi disco una atmósfera, de repente hizo que mis canciones sonasen contemporáneas.

Lo que predomina en el disco son las canciones de amor, ¿no?
Puede ser, lo son en una forma u otra. En realidad sucede en casi todo el rock and roll, que es realmente simple. Parte de lo que le da su profundidad son precisamente esas rimas sencillas en plan “be my baby” o “if you don’t love me”. Mucha gente está perdiendo parte de ese espíritu de lo que solía ser el rock and roll.

Me llama la atención esa característica de tus letras, donde repites constantemente las mismas palabras y expresiones. ¿Es una forma de reivindicar ese espíritu?
Hay algo que me atrae de la simplicidad. Si golpeas un solo acorde con tu guitarra con la suficiente ferocidad, puede convertirse en el más importante acorde de tu vida, el más bello sonido. Eso es espiritualmente muy simple, y cualquiera puede hacerlo. Cualquiera puede hacer casi todo. Puedes aprender a tocar una pieza de violín de Stravinsky, no está fuera del alcance de la mayoría de la gente si perseveras, pero la música no es eso, no consiste en tocar las notas correctas en el orden correcto, sino en obtener alma y magia, y eso no se puede detener. Lo especial es buscar eso: no hay una fórmula matemática para hacerte llorar o ponerte feliz o encontrar la redención, es algo más intangible y tú tienes que seguir buscándolo.

He leído que en la gestación de este disco ha sido muy importante el hallazgo de una guitarra acústica Gibson de1929. ¿Contribuyó eso a hacer el álbum algo más lo-fi? ¿Estabas ya cansado de la electricidad, la distorsión y el drone?
Pasé por muchas ideas con respecto a este disco, pero ninguna parecía sonar bien. Siempre quise hacer discos como las grabaciones de sonido lo fi de George Mitchell y como las grabaciones de campo, pero también como las producciones de Phil Spector y como todo lo que amo y que está en medio de ambos extremos. Es imposible volcar toda esa información en un disco, así que éste tuvo que encontrar el lugar en donde estuviese más cómodo. Lo intenté de muchas maneras diferentes y creo que, finalmente, se alineó con “Amazing Grace” aunque viendo que sería mejor sin producción. Si le metía distorsión parecía que lo que sucedía es que había contratado a un técnico de estudio para hacerlo. Puedes hacer que un disco suene psicodélico si grabas varias cintas hacia atrás, metes efectos raros, delays o lo que sea, pero eso no lo hace psicodélico, no lo acerca a la verdad de ese tipo de música. Eso es lo que me estaba sucediendo a mí. Creo que finalmente lo que tiene es ese tipo de electricidad de bajo nivel, como la de los hospitales, porque allí hay mucho miedo y pánico y tienes que mantener la calma. Creo que mi disco suena así, tiene esa energía.

Tú voz suena ahora más frágil y vulnerable y, curiosamente, me recuerda por momentos a la de Daniel Johnston.
Me habría encantado, la voz de Daniel es remarcable, quizá porque él no está bien y tiene esa discapacidad para decir las cosas. Mucha gente ha añadido eso a su material, la intención de decir las cosas de modo realmente veraz, con líneas brutalmente honestas, y me gustaría acercarme a eso. Creo que también se debe a que todo está compuesto con la guitarra. Nunca me había visto antes cantando canciones sentado con la guitarra acústica. Mi voz tendía antes a sonar más alto.

Recuperas en el diseño artístico toda esa iconografía médico-religiosa que ya estaba en “Ladies And Gentlemen, We Are Floating In Space”. Tras pasar tanto tiempo en el hospital, ¿todo eso tiene ahora más sentido para ti?
(Risas) En realidad, siempre me ha encantado eso, las líneas claras, el blanco de los hospitales, toda esa cosa minimal. Recientemente me acordé de que el primer disco que compré fue de The Stooges, “Raw Power”, y lo adquirí en una farmacia de Rugby. Hubo un tiempo en que en el Reino Unido los vendían allí, en puestos giratorios como los de venta de postales. Recuerdo aquella bonita foto de Iggy con los pantalones plateados, aquel pelo, me enamoré y lo compré. Si tuviese que resumir lo mejor de mi vida en un momento sería aquel: comprar el disco de los Stooges en una farmacia.

Me desconcierta el videoclip de “Soul On Fire” ¿Buscabas mezclar tus obsesiones habituales con Tu biografía reciente?
Creo que es realmente bonito, ¿no?. Y lo que sí quiero remarcar es que es jodidamente importante para mí no utilizar mi enfermedad para vender el disco. Al mismo tiempo, todo lo que hago parece destinado a hacer mi enfermedad más importante, como si incurriera en el mismo error una y otra vez. Pero, de algún modo, todo funciona. Antes que hacer vídeos, pensamos “cojamos el dinero y vayámonos a un sitio realmente especial, a alguien donde nadie haya irrumpido, al cráter de un volcán”. Nos fuimos a ver la luz del norte a Islandia con algo de ropa sin ninguna intención clara. Vimos la luz y nos dio algunas ideas psicodélicas que luego vimos que no nos inspiraban nada. Era mejor hacer eso que entrar en un estudio y hablar con unos expertos en vídeos que nos diesen su idea de cómo hacer un film con nuestra música.

¿Cómo surgió la colaboración de la Rachel Korine, la esposa de Harmony?
Ella actúa en la película. Este tema, en concreto, fue escrito para Emmylou Harris, pero luego me puse enfermo y cuando volví ya no tenía valor ni fuerzas para pedírselo. Cuando salió lo de “Mrs. Lonely” ella canta una canción en la peli, y funciona muy bien porque ella lo hace de un modo muy directo. Fue la última canción que entró en el álbum, y eso la hizo muy especial. Extrañamente, conocí a Emmylou Harris recientemente, como hace semana y media, le di una copia del disco y le conté la historia.

He leído que Samantha Morton, que es amiga cercana tuya, sufrió un ataque cardiaco y estuvo hospitalizada en la misma época que tú…
Voy a ignorar este tipo de cuestiones, David. No sería justo para ella, y en Inglaterra ya se ha convertido en asunto de tabloides.

De acuerdo, disculpa, era simple curiosidad pero no tengo mayor interés en ello. Cambiamos de tema, ¿sabes que vais a coincidir con My Bloody Valentine en el próximo FIB?
(Risas) ¿Ah, sí? Kevin es un buen amigo, y me parece que esto es bueno para él. Yo tengo un problema con las bandas que se reúnen. La gente suele hablar de ello como de una forma de celebrar una música magnífica que se hizo antes pero la motivación suele ser otra, porque este tipo de reuniones normalmente están persuadidas por una gran cantidad de dinero. El dinero no es la mejor motivación en ninguna forma de arte. Es difícil, porque Kevin es un buen amigo y le deseo que le vaya de la mejor forma posible. Es raro, porque no es algo que esperase que fuese a suceder ahora. Por otro lado, puede estar bien, porque su música siempre ha mirado hacia delante.

Canción del día: "Soul On Fire" (Spiritualized)
http://www.youtube.com/watch?v=yuEOqzs76sE