Discos gallegos favoritos 2014

1. CHICHARRÓN: Chicharrón 
Dos de los mejores grupos del nuevo underground gallego, Franc3s y Telephones Rouges, se disolvieron el pasado año, pero sus respectivos cabecillas, Alberto M. Vecino y Rubén Domínguez, inician un nuevo proyecto completado por el guitarrista Diego Gende, y de carácter más intimista y completamente acústico. Como sucediera con las bandas anteriormente citadas, Chicharrón no se parece a ningún otro grupo, pero su debut se revela como la obra más personal de Vecino. Lo define como “un álbum conceptual sobre el amor como salvación” y, a pesar de rozar con la punta de los dedos clichés de tipo fatalista sobre el dolor, la culpa, el romanticismo y la redención; hace de sus canciones algo veraz y creíble al defenderlas desde las vísceras y desde una poesía de la vulnerabilidad tan nudista como hipersensible. Uno de los grandes discos secretos que deparará el pop nacional este año. 

2. ARIES: Mermelada dorada 
Para Isabel Fernández la melodía es lo más importante: lo era en su grupo anterior, Charades, junto a la dulzura de su voz y a unos textos intimistas que, con aparente sencillez, hablan de amor y autoafirmación, quizás de otras cosas, con la naturaleza y el cosmos como testigos cuasi mágicos. Aries es el proyecto unipersonal de la bilbaína ahora afincada en Vigo, y éste un segundo álbum que va aún más allá en su personal construcción de un pop-collage caleidoscópico y exuberante. Isa echa mano de instrumentos orgánicos y electrónicos, de samples y de algunos amigos –Joan Colomo, Alba Blasi (Extraperlo), Andrés Magán (Fantasmage)- para elaborar un mundo propio con la vista puesta tanto en clásicos de los 60 (Beatles, Beach Boys) como en la tropicalia futurista y, especialmente, en Animal Collective (¿es el título un guiño al “Strawberry Jam” de los neoyorquinos?) 

3. APENINO: Viravolta 
Tras varios años de silencio sólo relativo, Apenino muestra en estos siete temas (cuatro de ellos interpretados en gallego, idioma que utiliza por primera vez) un importante salto evolutivo con ventanas abiertas a la reflexión político-existencial, a poesía navegante entre el dolor y la luz e incluso a una valiente y bella versión de Camarón de la Isla desde una óptica electropop. Contribuciones de Mónica Vacas (ex Mus), Linda Guilala, Arturo Vaquero, Rafa Romero o el ilustrador Guillermo Arias contribuyen a redondear el que se puede considerar su mejor trabajo. 

4. OCRE: Torpe 
Pop electrónico de habitación coruñesa con personal aliento poético. Grandes textos de Xoansinho Daviña y Edu Poch. 

5. SRASRSRA: Magia de muerte 
Mantienen el estilo acelerado, sucio y loco pero con temas algo menos logrados y menor capacidad de sorpresa que en un álbum de debut que ponía el listón altísimo.